Guadalupe,
N.L., 23 de julio de 2014
Las Comunidades Eclesiales de Base en México
Las Comunidades Eclesiales de Base (CEB) no son un movimiento más en la Iglesia católica, sino la iglesia misma en movimiento, son un modelo eclesial que nace en América Latina en el contexto renovador del Concilio Vaticano II, como respuesta a la necesidad de vivir con mayor coherencia el Evangelio en un contexto de graves problemáticas sociales, políticas y económicas, formando pequeñas comunidades de personas que se reúnen a leer la Biblia y desde ahí buscar caminos para transformar la realidad social desde la perspectiva del Reino.
Las CEB desde hace casi 50 años viven en lo
cotidiano la llamada opción por los pobres y por una iglesia pobre, que pregonó
el papa Juan XXIII al convocar al Concilio Vaticano II y ahora el papa
Francisco ha insistido mucho frente a la enorme desigualdad que se vive en el
mundo.
En México, la experiencia de CEB inicia en los años 67-68 y ha caminado por cinco grandes etapas:
En sus más de 45 años de presencia en México ha realizado 18 Encuentros Nacionales, que congrega cada cuatro años a delegados de todas las CEB quienes, siguiendo el método Ver-Juzgar-Actuar (típico de la iglesia latinoamericana), analizan la realidad histórica a la luz del Evangelio y el Magisterio eclesial, para asumir compromisos frente a las más acuciantes problemáticas de los pueblos, desde lo concreto hasta una incidencia mayor.
Estos días (21-25 de julio de 2014) está realizando su 19 Encuentro Nacional con el objetivo de Fortalecer la Iglesia, Pueblo de Dios, en el nivel de Comunidad Eclesial de Base, que comparte sus experiencias como signos de esperanza por un mundo nuevo, para responder a los desafíos del México de Hoy. Este encuentro se realiza de manera simultánea en tres diócesis del país: Puebla, Cd. Guzmán y Monterrey, con una participación total de 1907 delegados de las 45 diócesis donde tiene presencia las CEB, así como invitados especiales de organizaciones sociales del país, de iglesias protestantes, así como invitados de Estados Unidos y el teólogo chileno Pablo Richard, del Departamento Ecuménico de Investigaciones (DEI-Consta Rica).
Participan 1265 mujeres y 642 varones. La mayoría (más de 1700) laicos, además de seminaristas (20 aprox.), religiosas (50 aprox.) y sacerdotes (100 aprox.). En la apertura y los trabajos ha contado con la presencia de los obispos de las diócesis locales (excepto Monterrey) así como del obispo de Saltillo, Fr. Raúl Vera López, OP; y recibido mensajes de apoyo de los obispos de Coatzacoalcos y San Luis Potosí.
En México, la experiencia de CEB inicia en los años 67-68 y ha caminado por cinco grandes etapas:
- Los orígenes. Del 67 al 70 que es una etapa de inicio donde brotan espontáneamente experiencias de CEB por todo el país (como surgieron en toda AL)
- El respaldo. De 1971 a 1979, es un periodo donde se impulsa fuertemente a las CEB y se inicia una sencilla articulación a través de las Asambleas y Encuentros Nacionales. Las Conferencias del Episcopado Latinoamericano de Medellín (1968) y Puebla (1979) las ratifican.
- La solidaridad. De 1980 a 1989, es una etapa donde se brinda apoyo a los países en guerra y/o que viven crueles dictaduras, el mayor respaldo estuvo dirigido a los países de Centroamérica. Se participa activamente en el movimiento popular.
- La resistencia. La década de los 90 es una etapa de búsqueda para adecuar el modelo y responder a los desafíos del mundo moderno-postmoderno.
- El fortalecimiento. En el año 2000 se realiza un diagnóstico a nivel nacional que se toma como base para poner en marcha una estrategia de renovación de las CEB en México.
En sus más de 45 años de presencia en México ha realizado 18 Encuentros Nacionales, que congrega cada cuatro años a delegados de todas las CEB quienes, siguiendo el método Ver-Juzgar-Actuar (típico de la iglesia latinoamericana), analizan la realidad histórica a la luz del Evangelio y el Magisterio eclesial, para asumir compromisos frente a las más acuciantes problemáticas de los pueblos, desde lo concreto hasta una incidencia mayor.
Estos días (21-25 de julio de 2014) está realizando su 19 Encuentro Nacional con el objetivo de Fortalecer la Iglesia, Pueblo de Dios, en el nivel de Comunidad Eclesial de Base, que comparte sus experiencias como signos de esperanza por un mundo nuevo, para responder a los desafíos del México de Hoy. Este encuentro se realiza de manera simultánea en tres diócesis del país: Puebla, Cd. Guzmán y Monterrey, con una participación total de 1907 delegados de las 45 diócesis donde tiene presencia las CEB, así como invitados especiales de organizaciones sociales del país, de iglesias protestantes, así como invitados de Estados Unidos y el teólogo chileno Pablo Richard, del Departamento Ecuménico de Investigaciones (DEI-Consta Rica).
Participan 1265 mujeres y 642 varones. La mayoría (más de 1700) laicos, además de seminaristas (20 aprox.), religiosas (50 aprox.) y sacerdotes (100 aprox.). En la apertura y los trabajos ha contado con la presencia de los obispos de las diócesis locales (excepto Monterrey) así como del obispo de Saltillo, Fr. Raúl Vera López, OP; y recibido mensajes de apoyo de los obispos de Coatzacoalcos y San Luis Potosí.
