Núcleo de Tizapán el Alto, Jalisco. Martes 22 de julio, 2014.
En la tarde del segundo día del XlX Encuentro de Comunidades Eclesiales de Base (Ceb), los participantes compartieron los “gritos” de cada una de las regiones. Hicieron una reflexión sobre las problemáticas y sus posibles soluciones; la violencia, inseguridad, la falta de empleo, las familias disfuncionales y la pobreza extrema fueron los gritos más fuertes.
El sacerdote Adolfo Malianche presentó, entre las posibles líneas de acción, las siguientes: reforzar el emprendimiento en los procesos, superar el conflicto entre Comunidades Eclesiales de Base y la Institución Eclesial, entre Iglesia y Gobierno, entre lo eclesial y social. A su vez destacó los aportes que emprende la Ceb con las luchas organizadas, la difusión creativa, los esfuerzos para conscientizar a la sociedad, especialmente al sector de los jóvenes, y fomentar la solidaridad mediante la realización de colectivos comunitarios.
Oaxaca, Puebla y el movimiento Jóvenes en la CEB animaron a los participantes a sumarse en proyectos que mejoren la situación de sus localidades, como son con “La Casa del migrante Ruchalu” (que significa bienvenido), y está situado en la parroquia de san Matías, Oaxaca. “La Pastoral de la Tierra” en Puebla, que busca proteger la identidad de los pueblos. Y el proyecto “SuBVersión” que es un sitio web que forma parte de jóvenes participantes en las Ceb.
El XlX Encuentro de Comunidades Eclesiales de Base continuará mañana miércoles 23 de julio. El tema central es escuchar la voz de Dios ante la realidad que vivimos que es el segundo paso metodológico del Juzgar. Por la tarde se celebrará la eucarística y habrá una fiesta popular donde los invitados de honor son las familias que hospedaron a los participantes.
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